Somos Tomodachi Invierno de 2018

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29necesario un programa de investigación y desarrollo que tenga en cuenta las normas y las condiciones particulares de circulación y de las carreteras de cada país. En lo referente al tipo de funciones de conducción automática que desean los conductores, por ejemplo, a los clientes alemanes les interesa más la conducción automática de larga distancia en la Autobahn (autopista), mientras que en Japón hay más demanda de conducción automática con paradas en tráfico intenso y para el estacionamiento automático: vemos que las condiciones de circulación se reflejan en las necesidades de los clientes. Nuestra empresa desarrolla muchos sistemas de conducción automática diferentes, y las pruebas de campo a gran escala de Japón serán de gran ayuda”.Wolfram admira especialmente el liderazgo de Japón a la hora de apoyar la innovación. “La preocupación actual más urgente es incluir pautas adecuadas para la conducción automática en el marco legal existente. Japón no solo cuenta con excelentes investigadores, sino que ha avanzado mucho en lo referente a proporcionar la coordinación necesaria. El programa SIP no solo conecta el sector privado con organizaciones gubernamentales y universitarias, sino que desarrolla proyectos planificados desde la investigación básica hasta la aplicación comercial y fomenta la participación extranjera. Esto demuestra que las autoridades japonesas están decididas a liderar el mundo en el desarrollo y la implementación de sistemas de conducción automática”.El proyecto SIP es también un caso de prueba en la búsqueda de la innovación abierta. La cooperación entre Japón y el resto del mundo acelera la innovación, y Japón trabaja duro para sentar las bases.La autopista metropolitana de Japón tiene muchos cruces y curvas, que requieren diferentes capacidades de la tecnología de conducción automática que la mayoría de las autopistas de Europa y los EE. UU.Michibiki y su contribución a la conducción automáticaEl Sistema de Satélite Quasi-Zenith del Gobierno japonés, Michibiki, también estimula la innovación en la conducción automática con su sistema de posicionamiento de alta precisión. Michibiki empezará a funcionar con cuatro satélites en 2018 y reducirá el margen de error existente en el posicionamiento de varios metros a tan solo seis centímetros. Esto, unido a datos cartográficos de alta precisión, promete una espectacular mejora a la hora de determinar la ubicación exacta de un coche. El objetivo de Michibiki es obtener conexiones fiables tanto en entornos urbanos como en la montaña, y se ha programado su ampliación a siete satélites para 2023.Berthold Wolfram, director general de Continental Japan relata que “el número de matrícula de los vehículos de prueba de Japón es ‘2020’. Nuestro objetivo es tener vehículos autónomos en las vías públicas en 2020, y además de participar en las pruebas de conducción del programa SIP, también nos centramos en el desarrollo de sistemas mejorados de sensores y frenos”.En la ciudad de Ginowan, prefectura de Okinawa, se probó un sistema de conducción automática en el contexto del programa SIP. Se utilizaron el Sistema de Satélite Quasi-Zenith Michibiki y mapas 3D de alta precisión para probar autobuses autónomos. Los objetivos principales del experimento eran el análisis comparativo y la mejora de la tecnología de los sensores.