Somos Tomodachi Primavera de 2015
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22Japoneses que contribuyen en otras partes del mundoTratamientos de vanguardia aliados de la maternidadEn Miami, Florida, en los Estados Unidos, una mujer japonesa está dando lo mejor de sí en el diagnóstico fetal de las cardiopatías congénitas. El Nicklaus Children’s Hospital planea establecer para 2017 una nueva sección de obstetricia para convertirse así en un centro de tratamiento de cardiología pediátrica que ofrezca una atención completa, desde el diagnóstico inicial, el parto y los procedimientos quirúrgicos hasta los cuidados postnatales. La doctora Nao Sasaki es una de los miembros que componen el núcleo del proyecto.“El diagnóstico fetal tiene ventajas para la madre, pero también para el niño que va a nacer”, asegura la doctora Sasaki. Se trata de las pruebas realizadas durante el embarazo para hallar cualquier anomalía en el feto. La especialidad de Sasaki es el diagnóstico por imagen mediante ecografía, para hallar anomalías en el corazón del feto. Cuando este sufre una enfermedad grave puede ocurrir que muera pocos días después de nacer si no es intervenido. Y si no se efectúa el diagnóstico fetal y tras el nacimiento se detecta la anomalía, el atraso en la acción no solamente pone en riesgo la vida del niño: la repentina noticia del problema de su bebé puede causar también un gran daño psicológico a la madre, que sufre un gran estrés después del parto.“Yo soy madre de dos niños, por lo que mi experiencia en el parto me permite empatizar fácilmente con las preocupaciones de una futura madre. Después de dar a luz se produce un desequilibrio hormonal en la madre y además el desgaste físico causado por el parto es grande, así que tanto mental como físicamente estará muy inestable. Oír que su hijo tiene una anomalía en el corazón puede causarle un daño psicológico enorme. Informarle correctamente y explicarle la necesidad de operar al bebé antes de que este nazca ayudará a que se prepare mentalmente y reducirá la ansiedad”.Pero comunicar esto a una madre no es nada fácil. La doctora Sasaki nos cuenta un caso en el que mediante el diagnóstico prenatal encontró en un feto una cardiopatía de tal gravedad que si no era operado inmediatamente después de nacer perdería la vida inevitablemente. Transmitir esto a la madre fue un trago muy amargo. La madre se quedó muy perturbada cuando se le comunicó que su bebé tenía una anomalía en el corazón.“Eso es lo más duro de mi trabajo. Pero yo siempre procuro explicar las cosas con serenidad y sin dar rodeos. Hago todo lo que puedo para tranquilizarlas y ganarme su confianza. Les explico que el corazón de su hijo es distinto a uno normal y que será necesaria cirugía y atención postoperatoria. También les digo que estaré con ellas en cada paso del camino, antes y después de que el bebé haya nacido”. Esa madre dio a luz a un niño, y actualmente se somete a revisiones periódicas en el hospital. El pequeño ha cumplido los dos años y anda perfectamente. Cuando encuentra a la doctora Sasaki, va hacia ella corriendo, con una sonrisa en el rostro. “Esos momentos hacen que recuerde que elegí la profesión acertada. Hacen que sea realmente feliz siendo doctora”. “En Florida aún hay mucho margen para la mejora en cuanto a la atención completa para las futuras mamás cuyos hijos sufren anomalías en el nacimiento. Nuestro plan en el futuro es poder realizar un diagnóstico prenatal para los niños con graves afecciones aquí, atender el parto aquí, y realizar los procedimientos quirúrgicos también aquí si fuese necesario. En otras palabras, nuestro objetivo es ser capaces de ofrecer un cuidado completo a la madre y al hijo sin necesidad de separarlos”.

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