Somos Tomodachi Invierno de 2015
31/40

Rakugo, el arte de hacer sonreír a las personasEn 1990 Diane viajaba alrededor del mundo, cuando una amistad le recomendó que visitase Japón. “Japón es un país seguro”, le dijo; y Diane viajó a Osaka siguiendo su consejo. “No hablaba nada de japonés, pero eso no me supuso ningún problema. Los japoneses son muy amables”, comenta.Diane viajó por el país durante tres meses. De Osaka se desplazó hasta Kioto, Nara, Tokio y Hokkaido¯. Pero fue en Osaka donde se enamoró de Japón y de la cultura japonesa. Diane aprendió alfarería, ikebana, kitsuke —el arte de ponerse un kimono— y sado¯ —la ceremonia del té japonesa. Sin embargo, la fama le llegó como intérprete de rakugo, el arte japonés tradicional de la narración cómica.Cuando vivía en Osaka, Diane conoció a Katsura Shijaku, un famoso intérprete de rakugo, y este le pidió que ejerciese de ochako —asistente escénica— en su espectáculo de rakugo en inglés. Este fue el primer contacto de Diane con este arte.Al ver la actuación de Shijaku, Diane se enamoró del rakugo. “Era muy orgánico y fresco”, cuenta. “El espectáculo consistía en una persona sentada en un cojín que, con solo un abanico y una tela doblada, hacía viajar a los oyentes con sus historias”. Diane también descubrió que el rakugo iba perfecto con su sentido del humor y que la hacía más fuerte. “Siempre he disfrutado de hacer reír a la gente, pero de niña no tenía demasiada seguridad en mí misma”, explica. El rakugo le permitió descubrir la confianza en sí misma y encontrar su objetivo en la vida: hacer sonreír a las personas.Diane no tardó en estrenar su primer espectáculo en inglés, una historia titulada Wonderful Japan (Japón maravilloso). Lo interpretó ante un público de 300 personas. Ahora que es una experta rakugoka (intérprete de rakugo) Diane actúa tanto en inglés como en japonés. También ha adoptado el nombre artístico de Diane Kichijitsu, un juego de palabras que significa “Diane la Afortunada”.Diane ha viajado a más de cuarenta y cinco países, compartiendo su amor por la cultura japonesa en todo lugar posible. Ha interpretado rakugo en los Estados Unidos, la India, los Emiratos Árabes Unidos, Noruega, Finlandia, Estonia e Inglaterra, su patria. También ha actuado por todo Japón.Las actuaciones de rakugo de Diane han influido en las vidas de muchas personas de alrededor del mundo. Uno de sus recuerdos más felices es el de cuando actuó en inglés en la ciudad noruega de Oslo. “Los niños lo disfrutaron de verdad”, comenta. “Una niña me dijo que quería ir a Japón tras ver una de mis actuaciones”. Diane estuvo contenta de hacer reír a los niños e inspirarlos a pensar en Japón.Diane también recuerda su experiencia como voluntaria en centros de evacuación tras el Gran Terremoto del Este de Japón en 2011. “Me fui a To¯hoku y me puse un kimono bien vistoso”, explica. “Hacía actuaciones de rakugo y a veces me ponía un divertido sombrero de globos. La gente se sentaba conmigo y me hablaba; me daban regalitos y yo escuchaba sus historias.” Un niño grabó la actuación de Diane en vídeo y le dijo “Cuando esté triste, lo veré y recordaré tiempos más felices”. Diane se sintió conmovida por su sensibilidad y su madurez.La experiencia de Diane en To¯hoku y alrededor del mundo le hizo darse cuenta del potencial del rakugo para hacer sonreír a la gente. “El humor es muy importante en casi todos los lugares y situaciones”, declara. Desde que llegó a Japón hace más de 24 años, Diane Kichijitsu ha influido en las vidas de las personas de cada lugar al que ha viajado, y seguirá haciendo sonreír al mundo en los años venideros.31

元のページ 

10秒後に元のページに移動します

※このページを正しく表示するにはFlashPlayer10.2以上が必要です